El P. José Kentenich, fundador de Schoenstatt , consideraba a San José como un modelo de santidad y patrono de la vida diaria, resaltando en él las virtudes de la paternidad, la obediencia a la voluntad de Dios, el trabajo digno y la valentía para acoger la vida en todas sus circunstancias, haciendo de San José un ideal para la espiritualidad de la Familia de Schoenstatt.
Es asi que luego de pandemia se propuso a familias de servidores del Santuario a comenzar a realizar el Santo Rosario a San José a lo largo y ancho del parque. Así fue como se gestó un vinculo profundo de servicio y profundización en la vivencia diaria en cada hogar.
Como San José, ver en las dificultades, una oportunidad para crecer y ser fiel al querer de Dios.
A lo largo de estos años, con cada rezo, cada paso , cada transmisión en vivo…se ha logrado una comunión entre los peregrinos presenciales que visitan el Santuario como tambien quienes estan lejos y tienen la posibilidad de visitar virtualmente este maravilloso lugar de gracia donde los fieles experimentan la presencia de Dios.
San José también nos enseña de modo muy especial a vivir en alianza de amor con María
San José es un especial patrono de la vida interior y de la oración, ya que él vivió en una constante intimidad con Jesús, el Hijo de Dios, y con la Santísima Virgen.
“El Guardián del misterio de Schoenstatt”
La misión de San José la debemos asumir todos nosotros: cuidar, amar, servir y estar al servicio de Jesús, el Niño, y de su Madre Santísima. Tomemos a San José como nuestro Padre y especial modelo y protector.
Queda abierta la invitación para todos los primeros domingos de cada mes donde San José sale al parque y como señal de que él comenzó el recorrido, es la requipe de la campana del Santuario.
¡Los esperamos!